Hay normas sociales, situaciones, costumbres o expresiones que son totalmente normales para una persona de Bilbao, pero no tanto para alguien que viene de fuera. Vivir en Bilbao tiene su idiosincrasia y en este artículo hemos recopilado alguna de las situaciones que, por muy normales que parezcan, pueden resultar curiosas o extrañas para el resto del mundo.
Varias de estas también son aplicables al resto de Euskadi porque, aunque Bilbao sea la capital del mundo, comparte muchas normas sociales o costumbres con el resto de Euskadi. Si echas alguna en falta puedes hacérnosla llegar a través de los comentarios e iremos ampliando la lista, porque lo cierto es que hay mucho más que solo estas.
- Tener nuestra propia baldosa.
- Llevar un paraguas incluso en verano.
- Y llamar sirimiri a una auténtica jarreada.
- Saludar a alguien con «aupa» «epi» «opi» o «aupi».
- Utilizar la muletilla «pues» para absolutamente todo.
- Llamar «agua de Bilbao» al champán.
- Y tostada a la torrija.
- Que el pastel ruso sea uno de los dulces más típicos de Bilbao.
- Y que el pastel de arroz no lleve arroz.
- Ir de pintxo pote.
- Los «txokos».
- Juntarse en la calle para beber.
- Que la gente de Bilbao sea «txirene».
- Referirse a las personas de Deusto como tomateros/as.
- Y llamar «amatxu» a la Virgen de Begoña.
- Que niñas y niños sean devorados por Gargantúa.
- Ponerse el cordón de San Blás y luego quemarlo.
- Tener un perro de doce metros de altura llamdo Puppy.
- Ponerle de nombre «fosterito» a la boca del metro.
- El uso doble del condicional en lugar del subjuntivo. Por ejemplo: «si yo sería de Donostia, estaría llorando».
- La cuadrilla como concepto inamovible de pertenencia a un grupo.
- El Athletic.
- Soñar con sacar la Gabarra por la ría.
- Llamar «Catedral del futbol» al estadio de San Mamés.
- Y definir Bilbao como la capital del mundo.