A lo largo del tiempo, han sido muchas las mujeres bilbaínas que han dejado su nombre grabado en la historia de la Villa. No obstante, invisibilizadas durante años a pesar de sus hazañas por el mero hecho de ser mujeres, un lastre del que sigue habiendo víctimas en la actualidad, muchas de ellas han quedado en el olvido o han sido relegadas a un segundo plano con respecto a los hombres.
Con motivo del Día Internacional de la Mujer, este 8M hemos querido darles el lugar que merecen en nuestra memoria colectiva a algunas de las mujeres que marcaron un antes y un después en sus disciplinas. Este es nuestro pequeño homenaje a ellas, a las mujeres ilustres de Bilbao.
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María Díaz de Haro (1270-1342)
Aunque hay que remontarse al siglo XIII para conocer la historia de esta mujer ilustre, en la actualidad sigue formando parte del día a día de los bilbaínos, ya que hay una calle en la ciudad que lleva su nombre. María Díaz de Haro, sobrina del fundador de la Villa, don Diego López de Haro, fue Señora de Bizkaia en tres periodos diferentes.
Durante su gobierno participó activamente en el desarrollo económico de la Villa, haciendo una nueva carta de población para Bilbao con la que quedaron confirmados los privilegios que le habían sido otorgados por su tío. Popularizada también como «la buena», fue también la fundadora de Portugalete (1322), Lekeitio (1325) y Ondarroa (1327).
Casilda de Iturrizar (1818-1900)
Conocida por muchos como la Viuda de Epalza, Casilda de Iturrizar pasó a la historia de Bilbao por su compromiso con los más desfavorecidos. Tras el fallecimiento de su marido heredó una gran fortuna que, no solo logró duplicar, sino que dedicó en gran medida a la construcción de escuelas, hospitales y otras obras de la caridad.
Con su solidaridad se ganó el respeto y el aprecio de la ciudadanía bilbaína, motivo por el cual se nombró en su honor el parque más importante de Bilbao, el Parque de Doña Casilda, en el que se conserva una fuente con su busto.
Además, también hay una calle en el Arenal que lleva el nombre de Viuda de Epalza, pero su figura logró hasta traspasar las fronteras de la Villa. Por su contribución a la reconstrucción del suelo de la iglesia de San Carlo alla Quattro Fontane de Roma, en el templo italiano hay una placa en su honor.
Josefa Cruz de Gassier (1821-1870)
Conocida como “La Gassier”, esta soprano bilbaína marcó la música de su época tanto dentro como fuera de nuestras fronteras. Tras debutar en Londres a los 25 años, empezó a subirse a los escenarios de todo el mundo y acabó por cosechar una asentada trayectoria internacional. Su éxito en América alcanzó tal nivel que el músico cubano Manuel Saumell compuso una contradanza que lleva su nombre.
Matilde Raimunda de Orbegozo (1837-1891)
Y de la música nos vamos a la literatura, porque mujeres ilustres bilbaínas ha habido en todas las disciplinas. Nacida precisamente en la calle Viuda de Epalza, esta poetisa de la Villa se convirtió en un hito gracias a su talento para escribir poemas, especialmente de carácter religioso.
Matilde Raimunda de Orbegozo comenzó a escribir desde muy joven y su trabajo fue publicado en diversos periódicos de la época, pero no existe ninguna recopilación de su obra.
Rafaela Ybarra (1843-1900)
La vida de Rafaela Ybarra estuvo estrechamente relacionada con la promoción de los derechos de la mujer, ya que dedicó gran parte de su vida a ayudar a las mujeres de la Villa. Se alejó de su estatus de mujer de alta sociedad y promovió pisos de acogida para niñas y jóvenes trabajadoras.
Además de darles cobijo y sustento, comenzó también a impartirles talleres de formación a la vez que impulsaba la creación centros de protección para otras mujeres. Durante toda su vida fue pionera en la lucha por la igualdad, logrando una serie de hazañas que la llevaron a ser beatificada en 1984 por el papa Juan Pablo II.
Eulalia de Abaitua (1853-1943)
Eulalia de Abaitua y Allende-Salazar fue una pionera de la fotografía en Bilbao. Reconocida como la primera mujer fotógrafa en Euskadi, la importancia de su legado reside en que su trabajo nos permite ver cómo era la Villa de finales del siglo XIX y principios del XX. Gran parte de su obra, compuesta por más de 2.500 imágenes, se conserva en el Museo Vasco de Bilbao, uno de los museos de Bizkaia que te recomendamos visitar.