Aunque se trata de una realidad que los bilbaínos ya conocían, ahora también ha quedado constatada a nivel internacional: Bilbao es una de las mejores ciudades del mundo para vivir, trabajar e invertir. Así lo recoge la consultora norteamericana Resonance en su lista anual World’s Best Cities, una guía que clasifica las grandes urbes del globo en función de las valoraciones de locales y visitantes.
A pesar de ser una de las ciudades con menor población de entre las 100 que figuran en el ranking, la Villa aparece situada en el puesto número 76. Supera, por lo tanto, a otras como Liverpool, Nueva Orleans, Glasgow, Ottawa o Marsella.
Es una de las 5 ciudades españolas que aparecen mencionadas entre las mejores del mundo. La preceden Barcelona, Madrid y Valencia y la sigue Sevilla. Se trata de todo un éxito a nivel nacional, ya que las dos primeras lograron colarse entre las 10 primeras.
Bilbao es sinónimo de prosperidad
Los dos factores que destaca sobre ella el estudio son la seguridad y el nivel de educación. De hecho, en lo que respecta al primero de ellos, World’s Best Cities la sitúa como la cuarta ciudad más segura del planeta. Alaba también su arquitectura y el urbanismo, cimentados en la actualidad en la sostenibilidad, los espacios verdes y la innovación.
Gracias a estos y a otros muchos factores, “Bilbao está rediseñando la buena vida europea”. Con su transformación en una ciudad del futuro, iniciada en 1997 con la inauguración del Museo Guggenheim, ha pasado de ser un motor de cambio a nivel local y regional a un fenómeno de índole internacional.
Prueba de ello es su aparición en el mapa económico y financiero, en el que ha emergido por su idoneidad para albergar la sede de grandes empresas y compañías como BBVA o Iberdrola. También es un síntoma de su éxito que haya sido seleccionada a la hora de organizar grandes eventos como el Tour de Francia de este año.