Las banderas azules son el distintivo con el que cada año se distingue a cierto número de playas del litoral español para destacar la calidad de su costa. Ecologistas en Acción ha querida dar la vuelta a la tortilla, poner las banderas al revés en señal de luto y otorgar la bandera negra. Se trata del distintivo de los 48 puntos de la costa más amenazados, degradados o contaminados.
Después de analizar más de 8000 kilómetros de costa plasmados en un informe de 200 páginas, la entidad ecologista ha determinado que casi 50 puntos de la costa española están en peligro. La mala depuración de aguas residuales, que está contaminando el mar; la masificación urbanística, la acumulación de basuras, los dragados o ampliaciones de puertos, la erosión de la costa y las afecciones a la biodiversidad son algunos de los principales motivos por los que se han otorgado las banderas negras de este año.
Aunque se encuentran repartidas por toda la península, Euskadi también está representada dentro del listado con cuatro banderas negras, estando dos de ellas en Gipuzkoa y otras dos en Bizkaia.
Bandera negra en Urdaibai y Muskiz
¿Aún no sabes si tu ciudad ha recibido una Bandera Negra? En este hilo te dejamos la lista completa. Para más información consulta el informe #BanderasNegras2022.
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— Ecologistas en Acción (@ecologistas) June 14, 2022
Las referentes a nuestro territorio se encuentran en Urdaibai y Muskiz, pero cada una de estas recibe el distintivo por motivos diferentes. La primera se debe a la mala gestión ambiental realizada por la Diputación Foral de Bizkaia, la cual hace referencia al proyecto que busca crear un nuevo Guggenheim en esta reserva de la biosfera.
La segunda, en cambio, hace referencia a la contaminación vertida por Petronor al río Barbadun y a la ocupación ilegal de terreno público de
Costas.
Las de Gipuzkoa, por su parte, se encuentran en Mutriku y en el Monte Antondegi. En este caso los motivos son los mismos que en Bizkaia, siendo el primero por razones de mala gestión y el segundo por contaminación.
Foto de portada: Javierme Javier Mediavilla Ezquibela / Wikimedia Commons