Al margen de debates sobre los ingredientes que debe o no llevar o sobre cómo de hecha debe estar, la pasión por la tortilla es una cuestión unánime que no conoce de límites geográficos. No obstante, la Bizkaia Ostalaritzako Elkartea ha querido levantar esas fronteras en la búsqueda del mejor ejemplar de nuestro territorio.
Para ello, han aunado a 64 establecimientos hosteleros de toda Bizkaia para celebrar una liga de 8 semanas cuyos niveles de adrenalina estuvieron a la altura de cualquier derbi celebrado en San Mamés. En su lucha por la Bizkaio Tortilla Kopa hubo 7 paladares protagonistas, los de algunos de los chefs más prestigiosos de Bizkaia, entre ellos Aitor del Olmo, cocinero de Amaren, y Dani García, del Aboiz.
No obstante, ningún paladar es más sabio que aquel que se encomienda a la tortilla del barrio en el día a día. Y precisamente ese reconocimiento ha caído en manos de un establecimiento de Bilbao.
Fueron Marcia Cazuza y Fernando Guillén, capitanes del Café-bar Tobogán, situado en Rekalde, los que en lugar de la Kopa se llevaron a casa el Trofeo Goiko, el premio popular. Aunque se quedó en octavos de final, la tortilla fue la predilecta del público vizcaíno, que tuvo la oportunidad de catar las 64 participantes de la competición entre el 26 de septiembre y el 16 de noviembre. Su apuesta por los ingredientes de kilómetro 0 cautivó a los votantes y recibió la mayoría de los votos.
Además, entre las cuatro finalistas de la Bizkaio Tortilla Kopa también había otra aspirante bilbaína: la tortilla de La taberna de Zarate. No obstante, la txapela acabó por alejarse un poco de los márgenes de la Ría que corresponden a la Villa y calló sobre la cabeza de la cafetería Izarra Berria de Leioa.