
En pleno distrito de Deusto, y entre las calles Larrakotorre y Pedro Astigarraga, se encuentra un llamativo conjunto edificatorio. Su nombre oficial es Grupo Pedro Astigarraga, pero estos inmuebles son comúnmente conocidos como las «Casas Americanas».
Esta atípico conjunto, el cual data de 1968, es fruto de un concurso convocado por el Ayuntamiento de Bilbao para la construcción de más de 200 viviendas en el barrio de San Ignacio. Rufino Basáñez fue el arquitecto elegido para esa labor, y junto a Esteban Argárate y Julián Larrea crearon esta innovadora y moderna construcción.
Basándose en un edificio marsellés llamado «L’Unité d’Habitation», la creación de los tres jóvenes arquitectos incorporó conceptos de la obra original como la composición volumétrica, las viviendas en dúplex o los tratamientos superficiales. Sin embargo, las «Casas Americanas» tienen detalles que las hacen únicas.
¿Por qué «Casas Americanas»?
Una de los detalles más llamativos de esta edificación reside en la distribución de las viviendas. Sus alargados pasillos exteriores y la espectacular escalera recuerdan a la estética americana, y son precisamente esos dos elementos los que le otorgaron el conocido sobrenombre a este conjunto edificatorio.
El proyecto que encabezó Rufino Basáñez rompió con varios de los moldes estéticos establecidos en la década de los 60. La propuesta del arquitecto chocó de bruces con la tónica habitual, llegando incluso a poner en duda la legalidad de su creación.
Una edificación premiada
La propuesta de los tres jóvenes fue tan transgresora y única con respecto al urbanismo de la época que, al igual que el edificio de Le Corbusier, esta fue totalmente incomprendida por la ciudadanía de los 60.
La sociedad no estaba habituada a propuestas edificatorias tan radicales como esta, y es por ello por lo que la distinción le ha llegado años más tarde. En 2013, la Fundación Docomomo reconocía al Grupo Pedro Astigarraga como patrimonio arquitectónico del Movimiento Moderno.
Todo un honor que no hace sino recalcar la innovación y calidad que hay tras este proyecto social. Una transgresora creación que rompió moldes y nombres para llegar hasta nuestros días como las «Casas Americanas».
Foto de portada: Zarateman / Wikimedia Commons