Tras más de 4.000 exhumaciones, el antiguo cementerio de Begoña está un paso más cerca de dar inicio a su nueva vida. La semana pasada el Ayuntamiento de Bilbao hizo público el proyecto elegido para la transformación de este emblemático espacio bilbaíno.
Elegido por el jurado profesional entre un total de 13 propuestas diferentes, la hoja de ruta hacia el nuevo futuro del camposanto respeta el objetivo del Consistorio con esta intervención: crear un nuevo espacio verde que respete la memoria histórica del cementerio.
Así lo indica su nombre, el Jardín de las memorias, bajo el que aspira a ser ambos un lugar de desconexión y un punto de encuentro con el pasado de la Villa. De esta forma, funcionará tanto como área de descanso como de punto de encuentro de visitas guiadas y eventos.
Para ello, el cementerio de Begoña se convertirá en un parque urbano con un jardín y una galería botánica integrados con el entorno. El equipo que lo ha ideado recibirá un premio de 20.000 euros y tendrá la posibilidad de optar a la adjudicación de la redacción del proyecto e incluso de su ejecución y dirección.
¿Cómo será el nuevo parque del cementerio de Begoña?
El cementerio de Begoña aspira a adherirse a la lista de espacios verdes de Bilbao tras convertirse en un gran parque. Este conservará su acceso actual, el de la calle Virgen de Begoña, pero tendrá dos adicionales, la de San Pablo y la de San Juan, en las calles Bilintx y Elizalde.
Se dividirá en dos espacios principales: una galería botánica de 3.700 metros cuadrados y un jardín central de 2.200 integrado por césped y senderos. La primera, constituida como un anillo perimetral, estará cubierta por árboles que servirán para aislar el espacio.
Prueba del dinamismo del nuevo parque es que el interior de la galería contendrá un jardín memorial de 660 metros cuadrados y un establecimiento de hostelería. Por su parte, el jardín central ha sido ideado con la intención de conservar los panteones y elementos más emblemáticos del histórico cementerio.