El Gobierno ha suspendido toda actividad no esencial: casi todos los trabajadores deberán quedarse en casa.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció la noche del sábado el cierre de todos los negocios no esenciales a partir del 30 de marzo y hasta el 9 de abril para reducir la movilidad en las calles y, de ese modo, limitar la expansión del coronavirus.
La medida se ha aprobado esta mañana en un Consejo de Ministros extraordinario donde se ha determinado qué actividades deben suspenderse y cuáles seguirán en marcha durante las próximas dos semanas de confinamiento en casa.
Desde el lunes solo los comercios y servicios esenciales seguirán abiertos y todos los demás quedarán suspendidos hasta que termine el aislamiento, a no ser que puedan realizarse desde casa.
Negocios que continuarán funcionando
- Servicios básicos: Alimentación, alimentación de animales, bebidas, productos higiénicos, farmacias, ópticas, recogida de residuos sólidos urbanos (recogida de basuras), gasolineras, estancos, tiendas de electrónica, prensa y papelería, comercio por internet, teléfono o correo, tintorerías, lavanderías, fabricación y distribución de limpieza e higiene.
- Transportes públicos.
- Correos.
- Medios de comunicación.
- Fuerzas de seguridad del Estado.
- Fábricas que producen material sanitario.
- Suministro de energía eléctrica.
- Servicios fúnebres.
¿Qué pasará con los trabajadores no esenciales?
Los trabajadores no esenciales confinados en sus casas recibirán un permiso retribuido recuperable que les permitirá cobrar su sueldo y devolver las horas perdidas de estos ocho días laborables más adelante, según lo que pacten con la empresa y antes del 31 de diciembre.
¿Todavía se puede trabajar desde casa?
Esta medida no afecta al teletrabajo ni a personas incluidas en un ERTE o en incapacidad temporal o que disfrutan de permisos de paternidad, según ha compartido María Jesús Montero, portavoz del Gobierno, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros celebrado el domingo.
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