Ante el previsible incremento de usuarios, el Gobierno Vasco ha propuesto el uso obligatorio de mascarillas en todo el transporte público vasco. Junto a esta propuesta también se ha anunciado que próximamente se realizarán controles de temperatura aleatorios tanto en el Metro de Bilbao, como en Euskotren. En caso de que la persona a la que se le haga este control supere los 37 grados, no se le permitirá viajar.
Así lo ha informado hoy mismo la consejera de Desarrollo Económico, Arantxa Tapia, tras la reunión celebrada por la Autoridad del Transporte de Euskadi. Estas propuestas se han planteado como medidas preventivas frente a posibles contagios una vez se levante el estado de alarma. Tapia ha remarcado el alto número de personas que se pueden llegar a aglomerar en el transporte público, por lo que se requiere de «nuevos elementos de protección».
Además de estas medidas, se instalarán «en los próximos días» dispensadores de geles hidroalcohólicos en las estaciones donde haya acceso con barreras.
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