
Con la primavera, Bilbao florece, se despereza, aprovecha el sol y la naturaleza de sus alrededores para ponerse todavía más bella. Es un momento óptimo para reservar un fin de semana y conocer un poco más allá. A tan solo tres horas desde el centro de la ciudad, encontramos un secreto a voces, ¿te suena Pau Béarn Pyrénées? Situada en plenos Pirineos Atlánticos, la ciudad tiene todo lo que nos gusta (y más): un castillo renacentista, un mercado delicioso con la mejor gastronomía francesa, barrios con encanto, planes culturales, actividades para toda la familia como su funicular… Te lo contamos todo.
Capital de la región del Béarn y cuna del rey Enrique IV y de Carlos XIV de Suecia, Pau Béarn Pyrénées es una coqueta localidad que combina riqueza histórica, patrimonio arquitectónico y entorno natural. Menos conocida que ciudades cercanas como Burdeos, Carcasona o Biarritz, la visita a Pau es más tranquila, más cercana, una escapada atractiva para quienes buscan un idilio francés sin prisas y con mucho encanto.
Un ejemplo son sus calles peatonales, tan bellas y pausadas, como la calle Joffre y la calle de los Cordeliers (en ellas se encuentran las tiendas de makers locales y boutiques con artesanos de la región); Henri IV, Louis Barthou, Serviez y la calle Foch (para las compras) o el Palais des Pyrénées, un gran mirador. Te contamos las paradas imprescindibles de esta escapada.
Un castillo de ensueño: Château de Pau
El skyline de Pau Béarn Pyrénées es una fantasía de cuento de hadas gracias, en gran parte, al Château de Pau. Aquí nació Enrique IV de Francia (no en vano, en la Place Royale, frente al ayuntamiento de la ciudad, preside una estatua del monarca). Su origen es medieval y, por ello, su ubicación es estratégica: se eleva sobre un promontorio rocoso desde el cual puedes ver el río Gave de Pau en pleno centro de la ciudad (en el Quartier du Château) por lo que es muy sencillo llegar a pie.
Su arquitectura es de estilo renacentista con toques medievales y en su interior encontraremos tapices, mobiliario y objetos que nos harán viajar al Renacimiento francés (como la reconocida «cuna de caparazón de tortuga» que es uno de los símbolos de la ciudad). Destaca su torreón de ladrillo rojo (Donjon Fébus), el patio de honor (Cour d’Honneur) y el porche (de la época de Napoleón III). Aunque, sin duda, uno de los lugares más bellos son los jardines exteriores y el parque (de libre acceso y gratuito durante todo el día).
🌷Visita al parque y jardines exteriores: libre acceso y gratuita
🎟️ Visita al interior del castillo: solo con visita guiada (7€; gratuita para menores de 26 años)
Un paseo panorámico por el Boulevard des Pyrénées
¿Cómo no caer rendidos ante estas vistas? Pau Béarn Pyrénées se encuentra en plenos Pirineos Atlánticos y en ello radica parte de su belleza natural. Este Boulevard (que une el castillo con el Palacio de Beaumont a lo largo de casi dos kilómetros) se construyó a finales del siglo XIX como paseo panorámico (con vistas de 180º sobre la cordillera de los Pirineos) y es, también, uno de los lugares más frecuentados por los vecinos. A lo largo del paseo, cafés, lugares para descansar…
🤫 Un secreto: este es el lugar donde pedir y catar una copa de Jurançon, el vino dulce autóctono, mezcla de uvas blancas de la región.
Pau desde el cielo y en trenecito
Un viaje en funicular
El funicular de Pau es una de sus grandes atracciones (y una de las preferidas de los más pequeños). Construido en 1908, subir a él es totalmente gratuito para un viaje de tres minutos. Sus vagones son originales y se calcula que cada año lo utilizan más de medio millón de personas.
🕢 Horarios: de lunes a sábado de 6.55h a 21.40h. Domingos de 13.45h a 20.50h (un viaje cada 8 minutos).
🎟️ Entrada: Acceso gratuito
Le Petit Train de Pau
¿Cómo decir que no al trenecito de Pau? Este Petit Train es una delicia para los más pequeños y una forma rápida y bonita de recorrer parte de la ciudad. El trayecto arranca frente al propio castillo de Pau y recorre lugares como el Palacio y parque Beaumont, el barrio Trespoey, el jardín japonés, las calles peatonales del centro, sus plazas y el Boulevard des Pyrénées. El viaje incluye explicación (en español) de cada uno de estos puntos con una duración de unos 35 minutos.
🕢 Horarios: salidas desde la Place de la Déportation (frente al castillo de Pau) a las 11:30, 14:30, 15:30 y 16:30h
🎟️ Entrada:8€ adulto/4€ niños de 3 a 11 años
El pulmón verde: parque y palacio de Beaumont
Al final del Boulevard des Pyrénées nos topamos con una imponente silueta: el palacio de Beaumont. Este edificio nos lleva de viaje histórico a la Belle Époque: construido en 1900, se trataba de un lugar por y para el ocio de la alta sociedad como palacio de invierno, casino y lugar de encuentro. Hoy en día acoge exposiciones, conciertos… funciona como palacio de congresos de la ciudad.
Lo que lo rodea es un precioso jardín al estilo inglés decimonónico. Es uno de los pulmones verdes de la ciudad, moteado por caminos serpenteantes, un lago con patos, un coqueto quiosco, un anfiteatro… y árboles centenarios que dan sombra a las familias que preparan picnics, juegan y descansan. Es uno de esos lugares en los que vivir en primera persona la forma de ser de este lugar, de l’art de vivre, del visitar un lugar con calma y despacio.
🎟️ Entrada: Acceso gratuito
Una visita al Museo de Bellas Artes
Por fuera, Art Déco. En su interior, un repaso por la pintura occidental desde el siglo XVI hasta la época contemporánea. Encontraremos obras de Zurbarán, Bassano, Jordaens, Luca Girdano, El Greco, Rubens, Degas, Kees van Dongen, André Lhote… así como sorprendentes hallazgos. Toma nota: aquí se encuentra una de las obras maestras de Degas, La Oficina del Algodón en Nueva Orleans, y también una curiosa y sorprendente momia.
Un secreto: no dejes de visitar la plaza del Bosquet, que hoy en día es un jardín de esculturas, un bello paseo entre arte a modo de museo a cielo abierto. Además, verás que la fachada se une caprichosamente a través de una «ola de cristal» a otro edificio (se trata de la École Supérieure d’Art Pyrénées Pau Tarbes).
🎟️ Entrada: Acceso gratuito
🕢 Horarios: de martes a domingo, de 11:00 a 18:00h.
🌷Visita al parque de las esculturas: entrada gratuita de 9.00 a 18.00h.
Gastronomía en el Mercado de Pau “Les Halles”
Los conceptos «Francia» y «disfrutar comiendo» van de la mano. Pero más, mucho más, en este mercado vivaracho y concurrido de «Les Halles». Un edificio moderno y luminoso que guarda puestos de productos locales (quesos, embutidos, panes, helados, buenísimos vinos de la región…). Además de encontrar mesas distribuidas por su interior, hay una zona de terraza cubierta en la que sentarse a degustar mientras escuchamos, de fondo, el barullo del mercado. Entre platos del día, raciones y productos frescos, lo difícil está en elegir… Pero te proponemos un consejo y tres soluciones para que no te pierdas entre tanto producto y puesto.
- El consejo: ¡hay que comer en horario francés! Se recomienda pedir antes de la 13.30h.
- La primera solución: cocina de mercado en el propio restaurante del mercado, L’Esprit des Halles. Su oferta pasa por cocinar esos productos de temporada y de mercado que tanto llamarán tu atención en el paseo.
- La segunda solución: Carreau des Halles, la zona del mercado dedicada, en cuerpo y alma, a los productores locales. Aquí se dan cita los quesos, las mieles, las verduras, las frutas… que nacen de la región del Béarn.
- La tercera solución (y la definitiva): Pass Gourmand es un ticket degustación que podrás comprar en la oficina de turismo de Pau. Este ticket contiene varias degustaciones válidas entre 23 productores y artesanos del mercado y calles peatonales del centro durante un año y se pueden compartir entre varias personas.
🕢 Horarios de Les Halles: de martes a sábados, de 7.00 a 15.00h; domingos, de 9.00 a 15.00h.
🎟️ Pass Gourmand: 10 degustaciones por 15€; 5 degustaciones por 8€.
Dos barrios con mucho, muchísimo encanto
Barrio del Hédas
Una ciudad se conoce caminando, imbuyéndose del ambiente, del espíritu mismo que se respira en sus calles, observando la vida diaria mientras paseamos y capturamos con nuestra retina lugares que se escapan a nuestra realidad. Esto es viajar, en esencia. Es lo que ocurre en el barrio del Hédas, datado de la época medieval. En sus intrincadas calles se encontraban los mataderos, las curtidurías o la casa del verdugo del pueblo. Esta imagen del pasado hoy solo se puede imaginar entre zonas peatonales de gran accesibilidad y tranquilidad.
Hédas es el nombre del antiguo arroyo que pasaba por aquí. Hoy funciona de nexo entre la Place d’Espagne (centro de la ciudad) con el foso del castillo por un paseo de 1,5 km que facilita su recorrido con un par de ascensores y escaleras.
🤫 Un secreto: os retamos a que encontréis dos pasajes con encanto (estos unen la calle Cordeliers al corazón del barrio).
Barrio Trespoey
Pau siempre ha sido un lugar ligado a la realeza y también a la burguesía que encontró en este punto de los Pirineos, un lugar de descanso y asueto. Pero… ¿por qué Pau? ¿Qué ocurrió para que la burguesía (fundamentalmente británica pero también estadounidense) viajase a este punto de Francia? La culpa la tiene, en parte, el médico escocés Alexander Taylor, quien escribió todo un tratado sobre los beneficios del clima de Pau para la salud.
Así fueron asentándose poco a poco, con sus casas de verano y sus palacetes en el barrio de Trespoey. A día de hoy, todavía podemos vislumbrar las grandes residencias de la Belle Époque paseando por estas calles, un recorrido arquitectónico y un viaje espacio temporal al siglo XIX y principios del XX.
🤫 Un secreto: otro reto, ¿encontraréis el jardín japonés que se esconde en este barrio? Toda una delicia.
Bicicleta y deportes de agua
¿Recordáis ese río que se ve desde lo alto del Château de Pau? El río que atraviesa la ciudad, Gave de Pau, es también uno de los hot spots del Pau (sobre todo, cuando el calor aprieta). Aquí los vecinos se refrescan en grupos de amigos y familia y, para los más animados, también se puede practicar rafting, hydrospeed o Air Boat (actividades disponibles para mayores de 8 años). Todo ello ocurre en Parc Aquasport, el estadio de aguas bravas de la ciudad, en donde suelen celebrarse competiciones deportivas.
En la ribera del río, para quienes prefieran un deporte en tierra firme, podrán caminar o alquilar unas bicicletas para recorrer el precioso itinerario junto al río, la Vélosud.