Se cumplen 125 años del primer vehículo ferroviario eléctrico del Estado, un hito que tuvo lugar en el tranvía que iba de Bilbao a Santurtzi en el año 1896. Este innovador medio de transporte dejó a un lado la fuerza del vapor y se embarcó en la entonces desconocida electricidad marcando un antes y un después en la historia.
Para rememorar y poner en valor el primer transporte sostenible que se puso en marcha en España, se ha creado una exposición con 25 fotografías que podrá disfrutarse en la estación de metro del Casco Viejo. La muestra, que estará disponible hasta el 24 de marzo, ha sido creada por el Gobierno Vasco en coordinación con el Museo Vasco del Ferrocarril y con la colaboración de la Red Ferroviaria Vasca.
Cabe destacar que, aunque Bilbao fuese pionera en la movilidad eléctrica, esta apuesta no estuvo movida por valores ecologistas. Tal y como menciona el director del Museo Vasco del Ferrocarril, Juanjo Olaizola, «no sabían ni lo que era la ecología».
Bilbao, pionera
La capital gipuzkoana no tardo en seguir los pasos de Bilbao, ya que un año más tarde, el 9 de octubre de 1897, se puso en marcha el primer tranvía eléctrico en Gipuzkoa: el de Donostia a Rentería. Este ejemplo sería secundado también por otras capitales como Madrid, en 1898; Barcelona, en 1899; Sevilla, en 1900, y Valencia, en 1901.
Además de ser pioneros en el transporte eléctrico, el 7 de diciembre de 1902 se inauguró el tranvía de Bilbao a Durango y Arratia, el primer medio de transporte del mundo que utilizaba una energía limpia y renovable gracias a la fuerza del agua procedente de los saltos de Maguna y Garai.
Foto de portada: www.125bilbaosanturtzi.eus